
Los agentes Antinarcóticos de la Policía Regional custodiaban un camino vecinal no transitado que –según las informaciones que poseían– era utilizado como pista clandestina, cuando aterrizaron los extranjeros a bordo de la avioneta con matrícula boliviana, conforme a lo referido por el agente fiscal Manuel Rojas Rodríguez.
Los extranjeros fueron reducidos y detenidos. En la avioneta solo había dos banquetas para los ocupantes y el resto estaba repleto de la cocaína.